Faltan menos de 48 horas para los Oscars, que se entregarán en la madrugada de mañana en el teatro Dolby de Los Angeles. El tiempo con el que se anunciaron las nominadas (hace más de un mes) y lo bien que se han portado las distribuidoras españolas y los académicos piratas han permitido que podamos ver este año todas las películas nominadas. Mañana por la noche estaré en mi cuenta de Twitter quejándome en directo de los premios, con los que seguro no estaré de acuerdo, pero de momento os dejo con mi opinión de las que, según la Academia de Cine, son las películas más importantes del año.
Amor
(Michael Haneke)
Cuando
esta película austriaca se coló entre las nominadas a mejor
película nadie se sorprendió. El respetado director había hecho la
que probablemente sea la película más accesible de su carrera, y el
resultado es una historia cruel y tierna a partes iguales sobre el
mal trago que supone afrontar una enfermedad degenerativa tanto para
quien la sufre como para quien comparte ese dolor. Con un estilo
calmado y sin artificios de ningún tipo (la película no tiene ni banda
sonora), Haneke nos cuenta la historia de amor definitiva y se gana
el derecho a titular así su película. El trabajo de los dos
protagonistas es asombroso.
Argo
(Ben Affleck)
Ya sabíamos que Ben Affleck sabía dirigir gracias a
The Town y Adiós, pequeña, adiós, pero la gloria le
ha llegado con Argo, este thriller que narra la
historia real de cómo la CIA consiguió sacar a seis diplomáticos
estadounidenses atrapados en Irán simulando el rodaje de una
película ficticia. Argo es emocionante, con un tramo final de
infarto, y muy divertida, gracias a ese dúo cómico formado por Alan
Arkin y John Goodman. Sin embargo, la cinta palidece en comparación
de muchas nominadas este año y la campaña victimista de Ben
Affleck, que por lo visto piensa que este año nadie merecía el
Oscar a mejor director más que él, me parece desproporcionada.
Bestias del sur salvaje (Benh
Zeitlin)
La
más peculiar de las nominadas. Me gustó mucho la historia de
hushpuppy y la
complicada relación con su padre, me interesó mucho el arraigo y el
sentimiento de pertenencia de los habitantes de “la Bañera” (el
lugar en el que viven y en el que una subida del nivel del mar puede
destrozar sus casas) y me fascinó visualmente. La banda sonora es
probablemente la mejor del año. Sin embargo, creo que hay cosas que
sobran (o que, personalmente, no he entendido). En cualquier caso, si
por azares de la vida Zeitlin ganase el Oscar a mejor director sería
un premio muy merecido y la mayor alegría de la noche.
Django Desencadenado (Quentin
Tarantino)
Tarantino
pasándoselo en grande. Eso es Django,
una película muy divertida con momentos épicos y unos actores
secundarios que brillan con luz propia (no solo Cristoph Waltz y
Leonardo DiCaprio, también Saumel L. Jackson). La cinta está
plagada de escenas largas en las que la tensión puede explotar en
cualquier momento, marca de la casa, y es una de las más
disfrutables del año sin duda. Sin embargo, no deja de ser poco
innovadora dentro del universo de Tarantino y excesivamente larga,
con bajones de ritmo (la última media hora se hace bastante pesada).
Los Miserables (Tom Hooper)
La
adaptación del famoso musical llevada a cabo por Hooper funciona a
la hora de emocionar. El recurso de los primeros planos y la música
en directo es muy efectivo, sobre todo en momentos como el de sobra
comentado 'I dreamed a dream'.
Sin embargo, la película luce barata y le falta poderío visual en
tramos como el de las barricadas. Conforme se va meditando, sus
numerosos defectos van saliendo a la luz, aunque no deja de ser una
de las películas más inolvidables de la temporada. No me convenció
Hugh Jackman, pero Anne Hathaway, Russell Crowe y Samantha Barks me
ganaron por completo.
La vida de Pi (Ang Lee)
Mi
película favorita de las nominadas y prácticamente del año. Ang
Lee consigue lo imposible llevando a la pantalla la novela de Yann
Martel, desplegando una cantidad de efectos visuales que la
convierten en un espectáculo para la vista, pero no en una nueva
Avatar, como la han
promocionado. La vida de Pi
logra que la historia de un chico y un tigre perdidos en el océano
no se haga larga en ningún momento, emociona y transmite un mensaje
con el que se puede no estar de acuerdo, pero que impide calificarla
de entretenimiento vacío. La mezcla de culturas que vemos en su
arranque es magnética y nos engancha rápidamente. ¡Y salen
suricatos! ¿Cómo no va a ser genial una película en la que salen
suricatos?
Lincoln
(Steven Spielberg)
Ya
reconocí en la crítica que hice hace un par de semanas las muchas
virtudes de Lincoln (sus magníficos actores y un guión efectivo), por lo que en estas líneas me voy a dedicar a comentar lo
mucho que la odié. Lincoln
es larga, mucho. Y si no
fuera porque el presidente se dedica a contar anécdotas kilométricas
cada dos minutos duraría la mitad. Es mortalmente aburrida y no
genera ningún interés a pesar de que sepamos el final (como sí
hacen Argo,
Zero Dark Thirty,
La vida de Pi,
Amor
o Lo Imposible),
la interpretación de Day-Lewis es muy buena pero distante, con lo
cual no me dijo nada, algo de lo que tiene mucha culpa el guión.
Objetivamente es buena, como ya dije, pero me pareció insufrible.
El lado bueno de las cosas (David
O. Russell)
La
película positiva y buenrollera del año. El guión de O. Russell es
genial y construye a unos personajes muy entrañables en su locura.
Jennifer Lawrence y, sobre todo, Bradley Cooper están geniales en
unos papeles que, sí, pueden ser muy agradecidos, pero no todo el
mundo habría sabido llevar a cabo. Robert De Niro es un auténtico
robaescenas y cuenta con los momentos más divertidos del año. He
oído a mucha gente que cree que la película finge ser lo que no es,
pero creo que desde el primer momento se nos vende como una comedia
romántica que sigue el esquema de las mismas. La diferencia es que
El lado bueno de las cosas
tiene unos personajes muy interesantes a los que el género no nos
tiene del todo acostumbrados.
La noche más oscura (Kathryn
Bigelow)
Bigelow, de la mano de Jessica Chastain, nos cuenta en La noche más oscura la obsesión por atrapar al terrorista más buscado de los Estados Unidos; una persecución de diez años que puede llegar a consumir a una persona. El personaje protagonista de la película es, a pesar de su frialdad, muy magnético, y consigue que el viaje no se haga pesado. Ya sabemos cómo acaba la cinta, pero la cantidad de detalles que en ella se revelan es su punto fuerte. No sólo vemos cómo percibía la CIA cada uno de los golpes que atestaba Al Qaeda, sino los métodos poco ortodoxos (y no ausentes de polémica) que emplearon para llegar hasta Bin Laden. La última media hora, a golpe de bombazo, te deja pegado a la butaca con los ojos como platos.
Mis
favoritos:
Mejor
Película:
La
vida de Pi
Mejor Director:
Benh Zeitlin (Bestias
del sur salvaje)
o Ang Lee (La
vida de Pi)
Mejor Actor:
Joaquin Phoenix (The
Master)
o Bradley Cooper (El
lado bueno de las cosas)
Mejor Actriz:
Jessica Chastain (La
noche más oscura)
o Naomi Watts (Lo
Imposible)
Mejor Actor
Secundario:
Tommy Lee Jones (Lincoln)
Mejor Actriz
Secundaria:
Amy Adams (The
Master)
Mejor Guión
Original:
Mark
Boal (La
noche más oscura)
Mejor
Guión Adaptado:
David O. Russell (El
lado bueno de las cosas)
Mejor
Película de Animación:
ParaNorman
o ¡Rompe
Ralph!
Mejor
Pelicula Extranjera:
Amour
Mejor
Fotografía:
La
vida de Pi
Mejor
Banda Sonora:
La vida de Pi
Mejores
Efectos Visuales:
La
vida de Pi
Mejor
Montaje:
La
noche más oscura
Mejor
Diseño de Producción:
La
vida de Pi
Mejor
Película Documental:
Searching
for Sugar Man
Mejor
Corto Animado:
Paperman
2 comentarios:
Hay un cierto resabio a religiosidad de pandereta en 'La Vida de Pi' cuando ya de por sí exuda espiritualidad por los cuatro costados. Por momentos me pareció apreciar fogonazos de Spinoza, ya sabéis, ese identificar a la naturaleza con Dios. Aún así, sus cuatro 'oscar' han resultado toda una sorpresa. No debería serlo: la factura de la película es impecable y las interpretaciones, incluida la del tigre, son formidables. Me esperaba algo más peñazo. Si te pasa lo mismo, dale una oportunidad, que igual te sorprende. Un saludo!!!
Exacto. Entiendo el rechazo a 'Life of Pi' porque desde el principio el protagonista quiere "hacerte creer en Dios", pero la película pretende algo muy distinto y el mensaje no tiene nada que ver. Es muy espiritual, pero eso no la convierte en peor película, y de hecho yo la disfruté muchísimo, así que también se la recomiendo a todo el mundo.
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